Acudimos a ellos para hacer tratamiento odontológico para mi hijo de 6 años. Las instalaciones son muy nuevas, con una sala para que los peques puedan jugar en los ratos de espera (que se agradece mucho jeje).
El personal es super atento y amables, Rocío es un encanto, Lola la dentista es maravillosa, con una sensibilidad y amabilidad con los niños exquisita.
Totalmente recomendables